domingo, 24 de enero de 2010

LA BUENA NUEVA



"...En aquel tiempo, Jesús volvió a Galilea, con la fuerza del Espíritu; y su fama se extendió por toda la comarca. Enseñaba en las sinagogas y todos lo alababan. Fue Jesús a Nazaret, donde se había criado, entró en la sinagoga, como era su costumbre los sábados, y se puso en pie para hacer la lectura. Le entregaron el libro del Profeta Isaías y, desenrrollándolo, encontró el pasaje donde estaba escrito: 'El espíritu del Señor está sobre mí, porque  él me ha ungido. Me ha enviado para dar la Buena Noticia a los pobres, para anunciar a los cautivos la libertad, y a los ciegos, la vista. Y, enrollando el libro, lo devolvió al que le ayudaba, y se sentó. Toda la sinagoga tenía los ojos fijos en él. Y él se puso a decirles: 'Hoy se cumple esta Escritura que acabáis de oír'."
Veíamos el domingo pasado, cómo Juan empieza la vida de Jesús con las Bodas de Caná. Su programa de acción: cambiar el agua, la doctrina de la Ley, en vino, la doctrina del Amor.
Hoy vemos cómo Lucas inicia la vida pública de Jesús en la sinagoga de Nazaret. También nos muestra su programa: La Buena Noticia, que es la doctrina del Amor.
Jesús viene a los pobres, a liberar, a dar luz...Les dice a sus conciudadanos que Él es el cumplimiento de esta Palabra, que Él es esta Palabra. Ellos sólo ven en él, al hijo de José. Si seguís leyendo el texto en vuestro evangelio, veréis que sus conciudadanos lo quisieron despeñar por un barranco...
Jesús viene a eliminar el mal. Viene a romper las cadenas que nos atan...Y ese es nuestro camino si queremos seguirle.: Luchar por la justicia, dar de comer y beber, curar, llenar el mundo de Amor...Es lo que nos dice Jesús, hoy, a TODOS...
Habrá quien dirá que hablar todo el día de Amor no es concretar nada. Que es muy fácil decir que se es cristiano porque se ama. Si es tan fácil, ¿por qué no lo hacemos? Es mucho más fácil cumplir unos ritos, seguir unas normas...y luego, seguir con nuestra vida de siempre.
Francisco, Teresa de Calcuta, Romero, Ferrer...dedicaron su vida a amar y no les fue fácil. Pero un día se encontraron con Dios hecho hombre en los pobres, en los sufrientes, en los oprimidos...y lo siguieron y dedicaron toda su vida a Él.
Nosotros, desde nuestra comodidad, pensamos que no hay que exagerar. Que lo importantes es no cambiar las palabras de la misa. Que eso es alinearse con el marxismo, es hacer política. (Curiosamente no pensamos lo mismo cuando nos ponemos junto a los políticos en manifestaciones para defender el "orden").
Pero, afortunadamente, en el mundo, en los barrios marginales, en los países del tercer mundo, hay muchos seguidores de Cristo (algunos sin saberlo) que hacen que aquellas palabras de Isaías hoy se cumplan también, y dedican sus vidas a socorrer al pobre, a curar al enfermo, a iluminar nuestro Mundo...

5 comentarios:

  1. Hablar vale de bien poco si luego no se concretan con acciones. Todos sabemos hablar muy bien de aquello que nos sustenta, de nuestros preceptos, de lo que hay que hacer.... Llevarlo a cabo es el Milagro del Amor.

    Un Abrazo, Joan.
    Hari

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  2. Con toda humildad comparto esta reflexión personal:

    «Cuando los fariseos se enteraron de que Jesús había hecho callar a los saduceos, se reunieron en ese lugar, y uno de ellos, que era doctor de la Ley, le preguntó para ponerlo a prueba: "Maestro, ¿cuál es el mandamiento más grande de la Ley?" Jesús le respondió: "Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma y con todo tu espíritu. Este es el más grande y el primer mandamiento. El segundo es semejante al primero: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. De estos dos mandamientos dependen toda la Ley y los Profetas"». Mt 22,34-40

    Reseño que el segundo es semejante al primero... ¿Qué sería de mi si olvidara el primero? Sin no amo a Dios y lo conozco ¿Cómo podré darme valor a mi mismo que soy imagen suya?. Si no me doy valor como imagen de Dios... ¿Cómo será mi amor al prójimo? El amor que dé será reflejo del menosprecio que me doy a mi mismo.

    «No piensen que vine para abolir la Ley o los Profetas: yo no he venido a abolir, sino a dar cumplimiento. Les aseguro que no desaparecerá ni una i ni una coma de la Ley, antes que desaparezcan el cielo y la tierra, hasta que todo se realice. El que no cumpla el más pequeño de estos mandamientos, y enseñe a los otros a hacer lo mismo, será considerado el menor en el Reino de los Cielos. En cambio, el que los cumpla y enseñe, será considerado grande en el Reino de los Cielos.» Mt 5,17-19

    Recuerdo el pasaje de Cristo y los mercaderes en el templo y lo que pensaron sus discipulos: «El celo de tu casa me consumirá». Jn 2:17. Cristo se enfrentó a gentes que vivian facilitando los animales para los sacrificios. Si los echaba del lugar... estaría poniendo en peligro la subsistencia de muchos de ellos. Pero el amor a Dios estaba primero...

    Tengo claro que aquellos que no quieren cambiar una línea de la liturgia son tan prójimos mio como el sufriente. ¿Merecen desprecio por su celo? Ellos aman a Dios por medio de la ley.. ya que lo conocen de esa manera... ¿Quien soy yo para poner peros a su celo? ¿Me faltará a mi el coraje para dar a Dios lo que es de Dios?

    Pero también es cierto que si los celosos de la liturgia no se vuelcan con igual celo, sobre sus hermanos sufrientes... serán tan tibios como aquellos que vuelcan su celo en nuestros hermanos sufrientes... olvidando el celo de Dios.

    ¿Es lícito ver la paja en ojo ajeno sin antes quitarme la viga que llevo puesta en el mio? Mucho tengo que mejorar... por eso no puedo más que reseñar lo que Cristo me/nos conmina a cumplir poniéndome como primer culpable de no seguirlo.

    ¿Que hacer? Prefiero pensar en la unidad antes que en la disgregación... ya que si disgrego entre anti y pro liturgistas ó entre pro y anti caritativos... estoy separando el amor a Dios del amor a mis hermanos. Actuando así estoy directamente haciendo el trabajo al diablo (Dia-bolos= el que separa). Mis hermanos son todos y por encima de todos ellos está Dios. Creo necesario unir antes que disgregar. Ruego a Dios para que nos permita disfrutar de una Iglesia completa que de dos magnificas semi-iglesias separadas y distantes.

    Sobre los políticos... demos al Cesar lo que es del Cesar... sin olvidar dar antes a Dios lo que es de Dios.

    Saludos fraternos :)

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  3. Hoy me asomo al Evangelio y me quedo con estas palabras:".... Pero un día se encontraron con Dios hecho hombre en los pobres, en los sufrientes, en los oprimidos...y lo siguieron y dedicaron toda su vida a Él."
    A esa forma de amor,yo la llamo sagrada¡
    Besucos sin fronteras

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  4. Siempre he pensado que hay muchas personas anónimas que dedican su vida a hacer cosas por los demás, que son capaces de dar-se por entero, pero esas personas no saldrán nunca en los papeles, siempre pasarán desapercibidas.
    Tengo ejemplos muy cercanos a mi de lo que digo y lo único que pido es que esos ejemplos sean capaces de transformar mi vida

    Un abrazo

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  5. Me ha llamado la atención la frase: "Para un cobarde como yo, el Universo del materialista tenía el enorme atractivo de que te ofrecía una responsabilidad limitada". Y es que hay que tener cierta cantidad de valentía (seguramente asistida por la fe) para aceptar sin peros la Palabra de Dios y la responsabilidad que conlleva.
    El presidente de la asociación de vecinos de mi barrio siempre anda cerca de la parroquia, siempre anda trabajando por el barrio, siempre intenta estar disponible, siempre anda diciendo que él no se mete en cuestiones de la Iglesia, siempre reticente aunque cercano. Antes no le entendía aunque colaboraba con él, pero ahora creo que empiezo a comprenderle.
    En cuanto a lo que decía en tu entrada anterior sobre los "cristianos sociológicos" no es una frase mía sino de José Navarro Chaparro que tiene algunas duras entradas como la de http://www.iglesiaendaimiel.com/Pepe/026.htm
    y antes de él también hablaba utilizando estos términos Rovirosa, fundador de la HOAC.
    Un abrazo
    Pablo

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