jueves, 8 de diciembre de 2011

EL ANACORETA Y LAS EXPERIENCIAS


Aquel joven hablaba entusiasmado de sus experiencias en un viaje que había realizado a África siguiendo un proyecto de una ONG. Cuando el joven marchó el Anacoreta dijo a su seguidor:
- Casi siempre confundimos experiencia con vivencia. Si las vivencias no se profundizan y maduran transformándose en experiencia, sirven de muy poco. Producen una sobreexitación que se disipa al poco tiempo.
Miró a su joven seguidor y concluyó:
- El otro día, un responsable de una ONG se quejaba de que la mayoría de los participantes en los proyectos, una vez finalizados, no se involucraban a la ONG y desaparecían.
Nuestra sociedad tiene muchas vivencias, pero poca experiencia. La vivencia es momentánea. La experiencia exige un compromiso. Es un camino a seguir, no una flor de verano...

2 comentarios:

  1. Bon día Joan Josep:
    Que matiners que som eh?
    Doncs si quan un persona es voluntaria, adquireix un compromís molt gran i devagades el camí es fa dur i cansat, i aleshores es quan hi ha persones que tiran la manta.
    I ja no sols en el voluntariat i son en les vivencies de mare, ser mare implica tota la vida, sobretot si es té algun fill malalt.
    Una abraçada germà, Montserrat

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  2. Montserrat. Quan tinc algú a l'hospital sempre he ser o molt matiner o molt tardaner...Una abraçada: Joan Josep

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