miércoles, 29 de febrero de 2012

EL ANACORETA Y EL PASADO


Aquella mujer sufría por su pasado. Siempre se lamentaba de lo que había hecho y lo que había dejado de hacer. De sus errores y fracasos, pero también de que lo bueno había pasado ya. El Anacoreta la hizo sentar, le sirvió un café con leche con galletas y le dijo:
- Hija mía has de asumir tu pasado, lo bueno y lo malo. Los triunfos te han hecho vivir y crecer. Los fracasos te han de servir de experiencia. Mirar hacia atrás ha de ayudarte a ser prudente, pero a seguir caminando hacia delante. 
La miró con ternura y añadió:
- Has de reconciliarte con tu pasado. Los remordimientos sólo sirven para paralizarnos. Has de cerrar tus heridas. Y eso sólo se consigue perdonando y, sobre todo, perdonándote...
Luego concluyó:
- Sólo aceptándote con tus virtudes y tus defectos; sólo asumiendo tus fracasos y tus éxitos, podrás seguir viviendo feliz y creciendo cada día... 

martes, 28 de febrero de 2012

MOTIVOS DE FELICIDAD...


"Si hoy te has levantado sin dolor y sano, eres más afortunado que millones de personas que hoy están enfermas, que esta semana no sobre vivirán.

Si no vives en un país en guerra, si no estás en la cárcel, ni vives con miedo a la tortura, entonces, eres más afortunado que quinientos millones de personas.

Si puedes ir a la iglesia, al Templo o seguir tus creencias sin que te persigan, tienes más suerte que tres millones de personas en este planeta.

Si tienes comida en la nevera, ropa en el armario, un techo para vivir y una cama para dormir, eres más rico que el 75% de la población mundial.

Si tienes unos ahorros y dinero en el bolsillo, ya formas parte del 10% más rico de este mundo.

Si has visto a tus padres envejecer juntos, tienes mucha suerte.

Si en tu rostro luce la sonrisa y eres agradecido por todo, eres bienaventurado, porque la mayoría de la gente puede hacerlo y no lo hace.

Si puedes leer este texto, eres mucho más afortunado que más de dos millones de personas que no saben leer.

Si puedes dar la mano a alguien y abrazarlo, alégrate, porque la felicidad ya es muy grande..."

(Traducido del Full Informatiu de la Comunitat Cristiana del Monestir de Sant Pere de les Puel.les, Hermanas Benedictinas. Ignoro el nombre del autor o autora)
Y es que cada día tenemos muchos motivos para ser felices y dar las gracias... 

lunes, 27 de febrero de 2012

LA IGLESIA ESTÁ COMO UNA REGADERA


¡Que nadie se asuste! No es un insulto, sino una imagen preciosa. El otro día me pasaron un estupendo escrito de Mario Cervera con este título. Como es demasiado largo para colgarlo como un post, intentaré hacer un resumen lo más fiel posible.
"Una regadera es un recipiente portátil para regar, compuesto por un depósito del que sale un tubo terminado en una boca con orificios por donde se esparce el agua.
De la misma manera la Iglesia ha de ser móvil, que llegue a todos los lugares. Su misión es regar de fe, dar vida a nuestro  mundo. Esa vida, fe, esperanza y caridad, es lo que se guarda en el depósito (¡qué mal entendemos eso del depósito de la fe). Tiene mecanismos, acciones para que pueda salir el agua de la fe. Tiene agujeros. Son ellos los que le hacen dar vida. Sin agujeros no hay regadera.
La única forma de que la Iglesia, como "buena regadera", sea eficaz, es por sus agujeros.
. El agujero del "no poder". La Iglesia ha de ser humilde. Reconocer que no es totipotente, sino humilde servidora del Evangelio, no predicarse a sí misma.
. El agujero del "no tener". Su única riqueza ha de ser el Evangelio y la riqueza humana de sus miembros. Sin tronos,dominaciones, principados, potestades...Eso la une a los pobres de la tierra.
. El agujero del "no saber".Ha de reconocer que no o sabe todo. Que puede haber mucho humano en lo que lleva tiempo atribuyendo a Dios. Dios la asiste como Él quiere(desde el silencio) y no como ella dice, con proclamaciones a golpe de decreto. El agua viva pasa por el no tener las cosas claras y no hablar con rotundidad y de manera absolutista.
. El agujero del "no ser". Ella no es Dios, ni es una prolongación de Dios. No se considera salvadora de la humanidad, ni el depósito de la verdad y la salvación. No se autoproclama infalible, divina. Reconoce su fortaleza en su debilidad.
. El agujero del "no hacer". No actúa en su propio nombre. No corta la cizaña, no intenta controlar, no manipula. No mete a Dios en todo. Cree que Él ya está metido en todo sin nuestra acción.Esto le hace ser humilde en su acción, en su presencia discreta.
- El agujero del "no querer". No quiere que todos la adoren, la idolatren, la aplaudan. Sabe que a Dios le gusta la diversidad, el espectro de colores, la espontaneidad y locura del espíritu. No quiere uniformar demasiado el culto, la doctrina, las estructuras.
En realidad estos agujeros son un deseo. Ojalá el mundo pueda decir de ella: "¡La Iglesia está como una regadera!", pero no por declaraciones ridículas e insistencias peregrinas, sino por porque está sanamente loca, loca por Cristo y por los seres humanos.
Ojalá la Iglesia no esté como una regadera, sino que SEA una regadera. Llena de agujeros, pero de los buenos.
¡Seamos una regadera en este mundo!" 
Quizá el texto es más un deseo que una realidad. Pero para todos aquellos que amamos nuestra Iglesia, con sus virtudes y sus defectos, un reto, una meta a conseguir.

domingo, 26 de febrero de 2012

EL DESIERTO



"Después de esto, el Espíritu llevó a Jesús al desierto. Allí vivió durante cuarenta días entre las fieras, y fue puesto a prueba por Satanás; y los ángeles le servían.
Después que metieron a Juan en la cárcel, Jesús fue a Galilea a anunciar las buenas noticias de parte de Dios. Decía: 
- Ha llegado el tiempo, y el reino de Dios está cerca. Volveos a Dios y aceptad con fe sus buenas noticias."  

Cada año empezamos la Cuaresma con el relato de las tentaciones de Jesús en el desierto. Marcos, el evangelista que leemos en el ciclo B, es el más escueto en su relato. Pero nos da tres pistas muy importantes.
Ya sabemos el simbolismo que tiene el desierto y la cifra cuarenta: tiempo de prueba, tiempo de lucha. Son los cuarenta años que el Pueblo ha de pasar antes no entre en la Tierra Prometida. Para Jesús esos cuarenta días le enfrentan a todo aquello que intenta apartarlo de su misión. Lo enfrenta con el mal.
Marcos apenas se detiene en contarnos lo ocurrido, pero nos dice tres cosas esenciales:
. Quien conduce a Jesús al desierto es el Espíritu. No cualquier soledad, cualquier silencio, cualquier tiempo de penitencia es válido. No hemos de ir al desierto por capricho nuestro. Es el Espíritu quien ha de conducirnos para que nos sea de provecho, para que nuestro retiro no sea mero egoísmo, regodearse en una paz artificial, huir de la realidad...
. El desierto es tiempo de prueba; tiempo para enfrentarnos con el mal. Es el momento de enfrentarnos con nuestra "sombra", con nuestras partes oscuras, con lo negativo que hay en nosotros. Pero a Jesús los ángeles le servían. No estaba solo. En nuestros tiempos de prueba hemos de saber mirar a nuestro alrededor. Veremos "ángeles" que nos confortarán. Siempre encontraremos a alguien que nos tenderá una mano. Es más, hemos de buscar esa mano, ese consejero, que nos ayude a enriquecernos en la prueba.
. Al salir del desierto la vida de Jesús ha cambiado totalmente y empieza a predicar la Nueva Buena. Tras nuestro desierto el tiempo ha de dejar de ser "chronos", un tiempo para aprovechar, un tiempo fugaz, para pasar a ser "kairós": el tiempo oportuno. El presente pleno. Más adelante Jesús nos dirá, que esa Buena Nueva es la de que los cojos andan, los ciegos ven, el oprimido es liberado. A eso debemos dedicar nuestro presente: a luchar por la justicia y hacer que el verdadero Amor reine en la Tierra...

viernes, 24 de febrero de 2012

EL VERDADERO AYUNO


La primera lectura de hoy, tomada del tercer Isaías es programática. Nos señala con claridad cuál es el verdadero ayuno.
"¿Para qué ayunar, si no haces caso? ¿Mortificarnos, si tú no te fijas? Mirad: el día de ayuno buscáis vuestro interés, y apremiáis a vuestros servidores; mirad: ayunáis entre riñas y disputas, dando puñetazos sin piedad. No ayunéis como ahora, haciendo oír en el cielo vuestras voces.¿Es ése el ayuno que el Señor desea, el día en que el hombre se mortifica? Mover la cabeza como un junco, acostarse sobre estera y ceniza, ¿a eso lo llamáis ayuno, día agradable al Señor?
El ayuno que yo quiero es este: abrir las prisiones injustas, hacer saltar los cerrojos de los cepos, dejar libres a los oprimidos, romper todos los cepos; partir tu pan con el hambriento, hospedar a los pobres sin techo, vestir al que ves desnudo y no cerrarte a tu propia carne. Entonces romperá tu luz como la aurora, y tus heridas sanarán en seguida; te abrirá camino tu justicia y te seguirá la gloria del Señor. Entonces clamarás al Señor y te responderá; pedirás auxilio, y te dirá: Aquí estoy."
El ayuno debe ir unido a la justicia. El ayuno debe unirnos a Dios y a Él lo encontramos en el hermano, en el otro, en el prójimo.
Este texto está escrito alrededor del siglo VII antes de Cristo. Y todavía no lo hemos asimilado...

jueves, 23 de febrero de 2012

EL ANACORETA Y EL ICONO


El Anacoreta y su joven seguidor, rezaron, como de costumbre, el Oficio de Vísperas ante el icono bizantino de Jesús, que tenían en su Oratorio. Al salir el joven exclamó:
- ¡Qué precioso es este icono!
Sonrió el anciano y dijo:
- Sí, sin duda. Pero, ¿sabes una cosa? Jesús no quiere que lo contemplemos como un cuadro, sino que le escuchemos, le imitemos y le sigamos. Ni el mejor cuadro, ni el libro más precioso de Jesús valen de mucho, si después de rezar ante el icono o leer el libro no cambiamos totalmente de vida, no nos convertimos.
Y se dispusieron a acabar de preparar la cena como cada día...

martes, 21 de febrero de 2012

LIMOSNA, AYUNO Y ABSTINENCIA


Limosna, ayuno y abstinencia. Estas son las tres actitudes que asociamos a la Cuaresma. Las tres unidas nos llevan al núcleo de la espiritualidad: acción y contemplación. Entrega e interioridad.
La limosna es algo más que dar un dinero. Es nuestra entrega total a los demás: dinero, tiempo, fuerzas, amor...Es solidaridad y donación. Es hacer del Amor algo concreto, no una teoría o un mero sentimiento.
Ayuno y abstinencia tampoco se refieren tan sólo a los alimentos. Debemos ayunar y abstenernos de las cosas superfluas, de todo lo que significa injusticia, egoísmo, violencia...Ayunar para que otros coman...
Los cristianos, si queremos aprovechar la Cuaresma, debemos intentar ser más solidarios y buscar lo esencial en nuestro interior. Esas deben ser nuestras limosnas, nuestro ayuno y nuestra abstinencia.
En estos días Él nos llevará al desierto y nos hablará al corazón. Nos dirá una palabra: Ama...

CUARESMA A LA VISTA


Mañana empieza la Cuaresma. Nuestra sociedad la ignora. Estos días las calles se llenan de jolgorio con el Carnaval, pero pocos recuerdan, que desde la Edad Media, esta era la forma de prepararse para cuarenta días de austeridad.
El Año Litúrgico, con la repetición anual de sus ciclos, nos invita a volver a empezar. 
La Cuaresma dura cuarenta días, en recuerdo de los cuarenta años del Éxodo. Pero, ¿qué sentido puede tener hoy la Cuaresma?
En Adviento preparábamos la venida de Jesús. En Cuaresma nos preparamos a la Pascua, a la Resurrección de Jesús, al triunfo de la Vida.
Cuaresma es penetrar en el desierto, reflexionar sobre nuestra vida e intentar cambiar. Los psicólogos dirían que es el momento de enfrentarnos a nuestra "sombra", a nuestra parte obscura. Por eso es tiempo de reflexión, meditación, silencio...La austeridad y la penitencia no se hacen por masoquismo, no se buscan por ellas mismas, sino que se hacen para adentrarnos en nuestro interior. El fruto de esa austeridad, de esa penitencia, será bueno que lo entreguemos a los que más lo necesitan, que no son pocos en estos tiempos de crisis. Ese es el sentido de la limosna, otra de las tradiciones cuaresmales, mirar nuestro interior para abrirnos a los demás...
Y todo esto con alegría. No como los fariseos, que no se lavaban ni peinaban para que todo el mundo supiera que ayunaban...
Son tiempos de perdón. Pedirlo y darlo. Mirar nuestros defectos, no para culpabilizarse, sino para intentar avanzar, crecer, mejorar un poco más...

lunes, 20 de febrero de 2012

EL ANACORETA, LOS RITOS Y EL RITUALISMO


Tras una ceremonia en la catedral el joven seguidor se quejaba de la profusión de ritos. El Anacoreta sonrió y dijo:
- Muchas veces, cuando criticamos los ritos, en realidad lo que queremos criticar es el ritualismo. Me explico. Los ritos son necesarios. El hombre, espontáneamente, llena su vida de ritos. Fíjate cómo cada día, ya al levantarte haces una serie de cosas iguales cada día. Los ritos no sólo son religiosos. La sociedad está llena de rituales. Y a los actos oficiales les llaman también "ceremonias". Fíjate en la entrega de los Oscar o de los Goya. En los inicios y clausuras de Olimpiadas, Mundiales de Futbol...¿Has asistido a un matrimonio civil? Se copian muchas veces los riruales religiosos...
Se detuvo unos instantes y luego prosiguió:
- Los ritos nos ayudan a captar sentidos más profundos. El problema surge cuando damos más importancia al rito en sí, que a lo que nos quiere decir. Cuando repetimos el rito sin saber ya lo que significa. Es entonces cuando caemos en el ritualismo. Y ya sabes, los "ismos" suelen ser la transformación de la idea en ideolgía. Entonces el rito ya no es símbolo y pierde todo su poder enriquecedor...
Puso una mano sobre el hombro del joven y concluyó:
- Por eso debemos esforzarnos en llenar de vida los ritos. Llenarlos de significado. Un rito que no nos ayuda a profundizar...vale más que lo eliminemos. O que nos esforcemos por  darle sentido...

domingo, 19 de febrero de 2012

LEVANTARSE Y CAMINAR...


"Algunos días después volvió Jesús a entrar en Cafarnaún. Al saber que estaba en casa, se juntaron tantos que ni siquiera cabían frente a la puerta, y él les anunciaba el mensaje.  Entonces, entre cuatro, le llevaron un paralítico. Pero como había mucha gente y no podían llegar hasta Jesús, quitaron parte del techo encima de donde él estaba, y por la abertura bajaron en una camilla al enfermo. Cuando Jesús vio la fe que tenían, dijo al enfermo:
– Hijo mío, tus pecados quedan perdonados.
Algunos maestros de la ley que estaban allí sentados pensaron: “¿Cómo se atreve este a hablar así? Sus palabras son una ofensa contra Dios. Nadie puede perdonar pecados, sino solamente Dios.” Pero Jesús se dio cuenta en seguida de lo que estaban pensando y les preguntó:
– ¿Por qué pensáis así? ¿Qué es más fácil, decir al paralítico: 'Tus pecados quedan perdonados' o decirle: 'Levántate, toma tu camilla y anda'? Pues voy a demostraros que el Hijo del hombre tiene poder en la tierra para perdonar pecados.
Entonces dijo al paralítico:
– A ti te digo, levántate, toma tu camilla y vete a tu casa.
El enfermo se levantó en el acto, y tomando su camilla salió de allí a la vista de todos. Así que todos se admiraron y alabaron a Dios diciendo:
– Nunca habíamos visto nada semejante."

Hoy, la primera lectura, sacada del libro de Isaías nos abre el camino a la reflexión:
"No recordéis lo de antaño, no penséis en lo antiguo; mirad que realizo algo nuevo; ya está brotando, ¿no lo notáis? Abriré un camino por el desierto, ríos en el yermo, para apagar la sed de mi pueblo, de mi elegido."
En el paralítico estamos representados todos los hombres atenazados por el mal. Nuestro egoísmo nos paraliza. Jesús nos ofrece el verdadero camino, el río del perdón para transformar nuestro desierto. Pero he aquí que el paralítico no puede llegar a Él. La muchedumbre no se lo permite. Nosotros, los cristianos, somos muchas veces quienes alejamos a los hombres de Jesús. Los que con nuestro egoísmo, nuestra cerrazón, nuestra "verdad", les impedimos pasar y acercarse a Él.
Pero aquellos cuatro hombres que le acompañan no se arredran. Ellos saben cómo llegar hasta Jesús. También hay profetas en nuestra sociedad. Apartan las tejas, hacen un boquete en el techo y lo bajan hasta Él. Quizá debamos abrir un boquete en el tejado de la Iglesia.  Limpiar y quitar impedimentos absurdos que hemos ido acumulando a lo largo de los siglos, y que nos impiden llegar a Dios. Juan XXIII abrió las ventanas, pero nosotros nos empeñamos en volverlas a cerrar. Un agujero en el tejado dejará pasar el aire fresco del Espíritu. Hará que no miremos atrás ni pensemos en lo antiguo, sino que sigamos el camino abierto en el desierto y nos dejemos bañar por el río del Amor.
Jesús perdona, porque la parálisis, lo que no nos deja avanzar, es el mal. Los escribas, los "perfectos" se escandalizan. Ellos prefieren unos fieles paralíticos, fáciles de manipular, aunque esto suponga que permanezcan en el mal. Jesús les demuestra, haciendo que aquel hombre se levante, cargue la camilla y ande, dónde está el mal y que el remedio es el perdón.  Porque el mal está en el egoísmo  que no nos deja avanzar; en las ansias de poder y de dominio; en la comodidad de hacer siempre lo mismo y mirar continuamente hacia atrás.
Nuestra sociedad está en un momento crítico, paralizada, desorientada. Necesita personas que sepan levantar tejados, que sepan abrir nuevos caminos, que la lleven a Jesús. El de verdad. El del Evangelio... 






sábado, 18 de febrero de 2012

viernes, 17 de febrero de 2012

SÓLO SE VIVE UNA VEZ


- Sí - dijo el Anacoreta - pero esto no implica que hemos de hacerlo todo, probarlo todo, vivirlo todo, tenerlo todo...
Miro a su joven seguidor y añadió:
- Eso implica que lo que vivimos lo hemos de vivir con plenitud. Que vale más la calidad que la cantidad...
Se detuvo unos instantes y concluyó:
- Si en nuestra sociedad hubiésemos puesto el esfuerzo en vivir con plenitud lo que nos toca vivir, en vez de querer vivirlo todo, nos habríamos evitado la mayoría de los problemas que ahora nos acosan...
Y volvió concentrado a sus ocupaciones...

jueves, 16 de febrero de 2012

LA CASA AGRIETADA


Todos nos damos cuenta de que la situación es grave. Nuestra sociedad se tambalea. El sociólogo jesuíta, José Mª Rodríguez Olaizola, en su libro "Hoy es ahora (gente sólida para tiempos líquidos)",Ed Sal Terrae, que os recomiendo, nos presenta la parábola de la Cabaña del tío Pepe, que nos sino nuestra sociedad.
El tío Pepe vivía en una cabaña. No era nada del otro mundo, pero era cómoda, se vivía bien y era suya. Pero he ahí que su entorno empezó a decirle que dónde iba con esas ventanas tan pequeñas. Que ahora se llevaban los grandes ventanales  y la luz. Así que empezó a abrir grandes ventanas. Otros le dijeron que ese comedor era muy pequeño, y las habitaciones. De manera que empezó a derribar tabiques, hacer altillos e incluso a adelgazar paredes maestras y reemplazarlas por estilizadas columnas; lo dejó todo en una sola pieza dividida en compartimentos. Precioso. Pero llegó el invierno y aquél inmenso espacio se transformó en gélido espacio y tuvo que emplear el doble ó el triple en calefacción. Observó un día que las paredes empezaban a agrietarse, incluso las columnas se torcían con el peso de la nieve en el tejado. Pepe está ahora preocupado, mirando su cabaña y con un miedo atroz a que se derrumbe todo sobre él. Claro que el entorno sigue diciendo que vendrá la primavera, con ella el sol y su cabaña volverá a ser acogedora y calentita. Mientras tanto han tapado con parches las grietas...
No hace falta ser muy perspicaz para hacer la comparación entre la situación de Pepe y la nuestra...Nosotros seguiremos emperrados en que nadie toque nada de nuestra cabaña, que nos ha costado muchos años conseguir aquella luz y aquel espacio (aunque nos muramos de frío y se agriete todo). Y ellos, el entorno, seguirán intentando poner parches a las grietas, para que se vean lo menos posible...Hasta que la casa se derrumbe y no haya más remedio que construir una nueva...

miércoles, 15 de febrero de 2012

NUEVA EVANGELIZACIÓN


Ante el anuncio de la Nueva Evangelización, los comités de Pastoral de las diócesis y parroquias han empezado a moverse. Pero a más de un cristiano le ha entrado el miedo en el cuerpo, pensando que lo que se intenta es dar carpetazo al Concilio. Cuando a Jesús le preguntan si Él es el que ha de venir les responde aquello de que los cojos andan, los ciegos ven...y los pobres son evangelizados. Es decir a la gente humilde se les anuncia la Buena Nueva (que no es precisamente enseñarles el catecismo).
En la página web de los Sagrados Corazones he encontrado este post, que me parece interesante y quiero compartirlo con vosotros:

 Así leemos en el Evangelio: Cuando a Jesús se le pregunta si es él quien tiene que venir en nombre de Dios, responde: “los ciegos ven, los cojos andan, los leprosos quedan limpios, los sordos oyen, los muertos resucitan y a los pobres se les anuncia la Buena Noticia”. Respuesta de Jesús que nos debe hacer reflexionar, porque son las señales del Reino (reinado) de Dios, aquí y ahora.

Hoy la medicina hace “milagros”. Así nos solemos expresar al referirnos a los adelantos que hay tanto en la medicina como, sobre todo, en la cirugía. Ciegos que empiezan a ver (cataratas); cojos que puede andar (trasplantes o ortopedia); leprosos que se curan (hoy es una enfermedad que se puede curar con relativa facilidad; sordos que oyen (audífonos sofisticados); los muertos resucitan (resucitan, no “reviven”).
Pero, ¿los pobres son verdaderamente evangelizados? Esta sería la señal más clara de ese reinado de Dios. La respuesta está en lo que entendamos por “evangelizar” Si lo entendemos como “hablarles de Dios, de la Iglesia, etc… habría que concluir que no. En primer lugar, porque no vamos a ellos (llegamos a pocos). Nuestras iglesias no suelen ser frecuentadas por los más pobres; nuestra pastoral y apostolado se suele dirigir a los que vienen (que no son ellos).
Si por evangelizar entendemos acercarnos a los más desvalidos, los más pobres, los marginados, los que no vienen a la iglesia, los excluidos, para decirles que Dios los ama, y nosotros también; para compartir con ellos nuestro amor, y aquello que tenemos y de lo que ellos carecen, todo hecho con sencillez, humildad, y hasta agradecimiento por aceptarnos, entonces sí que podemos ir pensando en que el Reino está cerca. Sólo entonces serán realidad las palabras de Jesús:…”y a los pobres se les anuncia la Buena Noticia”.
Si nos acercamos a cualquiera de las parroquias, veremos en algunas de ellas un fuerte movimiento de pastoral. Pero si analizamos quienes son los beneficiarios y los agentes de esa pastoral, nos daremos cuenta de que faltan esos”pobres que tienen que ser evangelizados”. Es verdad que a ciertas horas, en ciertos días, junto a cierta puerta de la parroquia, espera un buen número de personas más o menos pobres (y más en la actual crisis), esperando la atención de Caritas: comida, recibo de la luz, del agua, de la casa…). Y se les atiende, en la medida de las posibilidades. Algo es algo; pero no es todo. Faltaría un plus para poder decir que son evangelizados. Sé que no es fácil, pero ¿quién ha dicho que el Evangelio sea fácil?
Necesitamos más entrañas de misericordia, más celo por el Reino de Dios, un amor más fuerte, para poder hacer ciertas cosas, para poder llevar en vivo el mensaje de Jesús.
Es cierto que hay lugares donde esa tarea parece ser más fácil, como es en los lugares de misión. Creo que en la mayoría de los casos, los misioneros evangelizan en su doble acción de promoción humana y sentido cristiano.
No sé si es muy posible, o sencillamente posible, pero creo que las parroquias, en general, deberían plantearse otro tipo de evangelización: sin abandonar a las 99 ovejas, ir en busca de la descarriada. Esa parábola de Jesús, algo nos querrá indicar.

(Félix González)
Blog católico de oraciones y reflexiones pastorales sobre la liturgia dominical. Para compartir y difundir el material brindado. Creemos que Dios regala Amor y Liberación gratuita e incondicionalmente.

martes, 14 de febrero de 2012

PADRE NUESTRO ( Y DE TODOS)


Os dejo la traducción de esta oración del Full de l'Arxiprestat de Berga. Ignoro su autor.
"Padre-Madre nuestro, de todas y todos: palestinos e israelitas, americanos y afganos, árabes y chinos, católicos y musulmanes...
Te pedimos por este mundo que cada vez se aleja más de Ti y encuentra la venganza institucionalizada en respuestas que atentan contra la vida.
¡La violencia genera más violencia y el odio más odio!
Padre-Madre nuestro que conoces lo que somos y lo que tenemos, y que penetras en lo más profundo de nuestros sentimientos. Haz crecer en cada persona el valor y el respeto por la vida, el perdón y la reconciliación.
Que cesa la espiral de violencia, odio y venganza...que acabará por destruir la casa común de todos.
Padre-Madre, que podamos hacer realidad el sueño de la humanidad: un mundo sin fronteras en el que se respeten los Derechos Humanos, donde no haya pobres, porque esté justamente repartido lo que Tú nos has dado, donde se comparta lo que tenemos, pero, sobretodo, lo que somos.
Padre-Madre de todas y todos, que vivamos cada instante de nuestra existencia con la certeza de que nos hiciste para Ti y volveremos a Ti.
No nos dejes caer en la tentación de estar solos, de creernos perfectos, de buscar en ídolos y amuletos la auténtica paz que nace de un corazón reconciliado.
Y danos la confianza y la seguridad de que todo pasa y sólo Tú quedas.
 Y con esto tenemos bastante. Amén."

lunes, 13 de febrero de 2012

LAURA, AKOSIWA Y EL AGUA...


A Laura, para que no llegue tarde al colegio, su madre ha de despertarla tres veces. Por fin se levanta y va al baño. La ducha deja caer sobre ella el agua a una temperatura conveniente, hasta que su madre vuelve a darle prisa, pues se está retrasando. Se está tan bien en la ducha...Luego se tomará una taza de leche caliente antes de salir hacia el colegio.
La madre de Akosiwa acaba de despertarla. Anuda un paño a su cintura y va en busca de una gran jofaina. Con su madre y su hermana, apenas el sol luciendo sobre el horizonte, han de ir al pozo que se encuentra a tres kilómetros. Sacar el agua a mano y cargar la gran palangana llena de agua sobre la cabeza y volver a casa. Ellos viven en la sabana, son pobres y no tienen pozo. El padre de la misión les ha dicho que está intentando buscar una ONG que incluya en un proyecto de verano, la construcción de un pozo junto a su casa. Cuando llegue a la cabaña llenarán la gran tinaja y velarán para que dure para las necesidades del día. Entonces podrá ducharse con el agua en una jofaina y echándosela encima con un cazo...Luego comerá un poco de agua con garí y quizá algún cacahuete y empezará los trabajos del día. No irá a la escuela. El otra día la echaron por no poder pagar la escolaridad...
Akosiwa sabe lo que vale el agua. Laura quizá lo sepa el día que al abrir el grifo no salga agua o la ducha se estropee y se tenga que lavar con una palangana y un cazo...El agua al supermercado irá a buscarla la criada o su madre. Aunque posiblemente utilicen el servicio a domicilio...

domingo, 12 de febrero de 2012

EL DIOS DE LOS EXCLUIDOS


"Un hombre enfermo de lepra se acercó a Jesús, y poniéndose de rodillas le dijo:
– Si quieres, puedes limpiarme de mi enfermedad.
Jesús tuvo compasión de él, le tocó con la mano y dijo:
– Quiero. ¡Queda limpio!
Al momento se le quitó la lepra y quedó limpio. Jesús lo despidió en seguida, recomendándole mucho:
 – Mira, no se lo digas a nadie. Pero ve, preséntate al sacerdote y lleva por tu purificación la ofrenda ordenada por Moisés; así sabrán todos que ya estás limpio de tu enfermedad.
Sin embargo, en cuanto se fue, comenzó a contar a todos lo que había pasado. Por eso, Jesús ya no podía entrar abiertamente en ningún pueblo, sino que se quedaba fuera, en lugares donde no había nadie; pero de todas partes acudían a verle."

Jesús, en este evangelio, nos señala claramente, que Dios no excluye a nadie. La ley judía era clara. Los leprosos, no solamente eran enfermos, sino que eran impuros y aquel que los tocaba, caía a su vez en la impureza. Por eso los leprosos se veían obligados a vivir apartados y a gritar "¡impuro, impuro!" cuando se les acercaba alguien.
Jesús no tiene ningún inconveniente en tocarlo. El texto nos dice que tuvo compasión de él y lo tocó. Jesús lo cura de la lepra, lo limpia, lo libera de la impureza...
Con este signo, nos dice claramente que para Dios no hay excluidos, nadie es impuro. Jesús ve ante él, no a un ser despreciable, sino a un hombre que sufre. Se conmueve y lo cura. Nos está señalando el camino a los cristianos. Una sociedad en que, lejos de excluir a nadie, abracemos a todos los hombres, pero sobre todo al que sufre, al despreciado, aquel que los demás estigmatizan. La forma de curar al delincuente, al drogadicto, a la prostituta...no es condenándolos, sino tendiéndoles la mano, amándolos.
Nosotros somos a la vez Jesús y el leproso. Nos hemos de acercar a Él pidiéndole nos limpie de nuestro mal. Pero también hemos de ser Jesús para aquellos que la sociedad excluye y tenderles nuestra mano. Ser para ellos la mano de Dios...La finalidad de la Iglesia no es condenar, ni crear grupos de "puros" perfectos, sino tender la mano al débil, al que cae, al "impuro", al excluido...para llevarlos a Dios. El Dios de todos...

sábado, 11 de febrero de 2012

LA SALUD, DERECHO DE TODOS

Ayer fue el Día Mundial de la Salud, sin demasiada publicidad, por cierto. Por eso hoy, en vez de la música del sábado, os cuelgo el vídeo de la campaña de Manos Unidas para el 2012. En estos días, en los que tanto nos quejamos de los recortes en sanidad, es bueno ver otras realidades.

viernes, 10 de febrero de 2012

EL NUEVO DIOS


Aquí os dejo este texto precioso de J.L.Martín Descalzo:

EL NUEVO DIOS

"Y cuando dijo "Padre"
el mundo se preguntó por qué aquel día amanecía dos veces.
La palabra estalló en el aire como una bengala
y todos los árboles quisieron ser frutales
y los pájaros decidieron enamorarse antes de que llegara la noche.
Hacía siglos que el mundo no había estado tan de fiesta:
los lirios empezaron a parecerse a las trompetas
y aquella palabra comenzó a circular de mano en mano,
bella como una muchacha enamorada.
Los hombres husmeaban el continente recién descubierto
y a todos les parecía imposible
pero pensaban que, aun como sueño, era ya suficientemente hermoso.
Hasta entonces los hombres se habían inventado dioses tan aburridos
como ellos,
serios y solemnes faraones,
atrapamoscas con sus tridentes de opereta.
Dioses que enarbolaban el relámpago cuando los hombres encendían
una cerilla en sábado,
o que reñían como colegiales por un quítame allá ese incienso,
dioses egoístas y pijoteros
que imponían mandamientos de amar sin molestarse en cumplirlos,
vanidosos como cantantes de ópera,
pavos reales de su propia gloria
a quienes habría sólo que engatusar con becerros bien cebados.
Y he aquí que, de pronto, el fabricante de tormentas
bajaba - ¿bajaba? - a ser Padre,
se uncía al carro del amor
y se sentaba sobre la pradera a comer con nosotros la tortilla.
Era un nuevo Dios bastante poco excelentísimo
que no desentonaba en las tabernas
y ante quien sólo era necesario descalzar el alma.
Aquel día los hombres empezaron a ser felices
porque dejaron de buscar la felicidad como quien excava una mina.
No eran felices porque fueran felices,
sino porque amaban y eran amados,
porque su corazón tenía una casa
y su Dios, las manos calientes."

(J.L. Martín Descalzo, Apócrifo, Edit. Cultura Hispánica)


jueves, 9 de febrero de 2012

UN TEXTO DE JOAN MARAGALL


El poeta catalán, gran amigo de Unamuno, escribió en el siglo pasado este texto:
"Decidme dónde haya existido una sociedad verdaderamente cristiana. Yo no lo sé. Yo sé de algunos hombres dispersos que han vivido en Cristo, y sé de instituciones originadas en su espíritu; pero de que haya existido una sociedad verdaderamente cristiana, de hombres vivos en Cristo, que haya permanecido, yo no lo sé. Por esto creo que la historia verdadera de la Humanidad está aún por empezar. Y que este mundo en que vivimos - o creemos vivir - de Estados y de leyes, y monarquías, y repúblicas, y socialismos y negocios, y de clases...este mundo yo creo que no es más que una prehistoria de la Humanidad: que todavía hemos de empezar a vivir - lo que se llama vivir - y que la vida está todavía oculta en nosotros; y que en cada uno de nosotros está todavía el Hijo de Dios predicando su Evangelio, esforzándose por avivar la chispa de la luz eterna, de la que cada hombre es sagrario, para incendiar el mundo en la vida que guarda dentro, y consumar así la creación de la tierra."
(J. Maragall,Obres Completes,Barcelona,Selecta ,1947, p. 840)
Es un error la Iglesia que cree que hay que volver a los tiempos en que la sociedad era cristiana, simplemente porque esta sociedad nunca ha existido. Una sociedad en la que se mataba, conquistaba, oprimía, discriminaba, torturaba, se ejercía el poder en nombre de Dios...no era ni puede ser cristiana.

miércoles, 8 de febrero de 2012

EL LLANERO SOLITARIO


En las películas clásicas "del Oeste", encontramos ese personaje, un cowboy cabalgando solitario por la pradera bajo el sol, la lluvia, el viento...Llegaba a un pueblo que sufría el dominio de una banda o de un banquero o una familia...Liberaba al pueblo del problema y...a pesar de las súplicas de los habitantes del pueblo y los encantos de alguna habitante, acababa el film, con el jinete alejándose y volviendo a la soledad de la pradera...
En un mundo en el que cuatro potentados dominan al resto y viven a costa de la crisis de los demás; en un mundo en que no se reflexiona y nos dejamos llevar por las opiniones interesadas de unos cuantos, sociedad líquida de pensamiento débil...Se echa en falta la figura del llanero solitario. De aquél que no se deja influir por la opinión de la mayoría ni se deja dominar por el más fuerte, sino que es capaz de señalar el camino, luchar y liberarnos. Es decir, hacernos Hombres.
Ese hombre siempre ha existido. No, no se llama el Llanero Solitario. Se le ha llamado siempre: profeta. Porque la mayor tentación que podemos tener, para querer liberarnos de la situación actual, es la de mirar atrás. La de pensar que cualquier tiempo pasado fue mejor. Por eso necesitamos alguien que nos haga mirar hacia adelante. Que si mira atrás no es para retroceder, sino para ver cuáles fueron los errores y evitarlos en el futuro.
Josep Otón también los llama Vigías del Abismo. Son los que saben ver lo que nadie ve. Por eso son incomprendidos, les llaman locos, incluso son perseguidos. Y si no los matan, se ven condenados a la soledad de la pradera; a seguir cabalgando bajo el sol la, la lluvia y el viento...
Yo cada día pido a Dios que nos mande alguno. De lo contrario, seguiremos siendo un pequeño pueblo de cobardes...

martes, 7 de febrero de 2012

MUCHAS LENGUAS, UN LENGUAJE (OREMOS POR LA PAZ)


Hoy la entrada es algo más larga de lo habitual. Aquí os dejo cinco oraciones por la paz, de cinco religiones diferentes. Cinco lenguas y un solo lenguaje.

ES HORA DE ROMPER CON EL ODIO
(Del judaísmo. Rabí Rami M. Shapiro)
La amenaza para nuestra salvación
es el conflicto entre nuestros pueblos,
judío y árabe;
descendientes de un mismo padre,
separados en la infancia por los celos,
en la adolescencia por el miedo,
en la madurez por el poder,
en la vejez por la costumbre.
Es hora  de romper con este hábito de odio
y crear otro nuevo: un hábito del corazón
que despierte en nosotros
el amor incondicional a la redención y la paz.

DIOS, TÚ ERES PAZ
(Del Islam. Oración final del Salat)
Dios, Tú eres paz.
De Ti nace la paz y hacia Ti va la paz.
Haz que vivamos, Señor nuestro, en paz
y que lleguemos a tu paraíso,
casa de la paz.
Tuya es la majestad y la alabanza.
Nosotros escuchamos y obedecemos.
Concedenos tu perdón,
Señor,
y que podamos ir hacia Ti

PAZ, PAZ, PAZ
(Del Hinduísmo. Las Upanishads)
Llévame de la muerte a la vida,
de la mentira a la verdad.
Llévame de la desesperación a la esperanza,
del temor a la confianza.
Llévame del odio al amor,
de la guerra a la paz.
Que la paz inunde nuestros corazones,
nuestro mundo, nuestro universo.
Paz, Paz, Paz

ENSEÑANOS AMOR, COMPASIÓN Y HONOR
(Del Pueblo Ojibwa. Indios del Canadá)
Antepasado,
mira nuestra decadencia.
Sabemos que en toda la creación
únicamente la familia humana
se ha desviado del Camino Sagrado.
Sabemos que estamos divididos
y que juntos debemos volver
a recorrer el Camino Sagrado.
Antepasado,
Espíritu;
enseñanos amor, compasión y honor
para que podamos sanar la tierra
y sanarno los unos a los otros.

DANOS CONCORDIA Y PAZ
(Del Cristianismo. San Clemente de Roma)
Te suplicamos, oh Señor Dios Nuestro,
que pongas la paz del cielo
en los corazones de los hombres,
para que pueda unir las naciones
en una alianza indestructible,
en el honor de tu santo nombre.
Purifícanos con la limpieza  de tu verdad
y guía nuestros pasos en santidad interior.
Danos concordia y paz a nosotros
y a todos los seres vivos de la tierra,
como se la diste a nuestros padres
que te suplicaron, con fe verdadera,
dispuestos a obedecer
al Santísimo y Todopoderoso.
Concede a los que nos gobiernan
y nos conducen en la tierra,
un recto uso de la soberanía
que les has dado.
Señor, has que sus criterios sean conformes
a lo que te es bueno y agradable,
porque, utilizando con
reverencia, paz y bondad, el poder que les has otorgado,
encuentren favor a tus ojos.
Sólo Tú puedes hacerlo,
esto y mucho más que esto.
Gloria a Ti, ahora y siempre.

lunes, 6 de febrero de 2012

EL ANACORETA, LA CONTEMPLACIÓN Y LA ACCIÓN


El joven seguidor preguntó al Anacoreta:
- ¿Qué es mejor, la vida contemplativa o la vida activa?
El anciano miró sonriendo al joven y respondió:
- En el evangelio de ayer vimos que Jesús predicaba, curaba y oraba. Predicar y curar corresponde a la acción y orar a la contemplación.
Se detuvo un instante y luego continuó:
- Creo que cometemos un error si separamos acción y contemplación. Si predicamos sin haber meditado antes, nos predicamos a nosotros mismos, no a Jesús. Si sanamos, liberamos a los demás, pero no meditamos, nos iremos secando y utilizaremos a los otros en nuestro provecho en vez de liberarlos. Si sólo meditamos y la oración no nos lleva a anunciar la Buena Nueva ni a liberar y sanar a los otros, simplemente, nos estamos mirando el ombligo.
Volvió a detenerse y concluyó:
- Vida activa y contemplativa han de estar unidas. Claro que en unas personas una primará sobre la otra, según su vocación, pero ambas han de ir siempre unidas...

domingo, 5 de febrero de 2012

SANAR Y ORAR



"Cuando salieron de la sinagoga, Jesús fue con Santiago y Juan a casa de Simón y Andrés. La suegra de Simón estaba en cama, con fiebre. Se lo dijeron a Jesús, y él se acercó, la tomó de la mano y la levantó. Al momento se le quitó la fiebre y se puso a atenderlos.

Al anochecer, cuando ya se había puesto el sol, llevaron ante Jesús a todos los enfermos y endemoniados, y el pueblo entero se reunió a la puerta. Jesús sanó de toda clase de enfermedades a mucha gente y expulsó a muchos demonios; pero no dejaba hablar a los demonios, porque ellos le conocían.
De madrugada, cuando todavía estaba oscuro, Jesús se levantó y salió de la ciudad para ir a orar a un lugar apartado. Simón y sus compañeros fueron en busca de Jesús,  y cuando lo encontraron le dijeron:
– Todos te están buscando.
Él les contestó:
– Vayamos a otros lugares cercanos a anunciar también allí el mensaje, porque para esto he salido.
Así que Jesús andaba por toda Galilea anunciando el mensaje en las sinagogas de cada lugar y expulsando a los demonios."

El Evangelio de hoy es la continuación del evangelio del domingo pasado. Jesús ha sanado a un endemoniado y ha dejado admirados a todos porque hablaba con autoridad. Ahora se dirige a la casa de Pedro. Allí sana a la suegra y esta les sirve. Acaba la jornada curando a más personas. Y por la mañana se retira a un lugar apartado a rezar.
Esta es la jornada de Jesús: Sanar y orar. Podríamos considerar a Jesús como un mago y quizá, algunos, en su tiempo lo consideraron así. Pero el sentido de "sanar" en el Evangelio es más profundo que el de simplemente curar de una enfermedad. Casi siempre va asociado a la expulsión de demonios, es decir, a la liberación del mal. La acción de Jesús es liberador. Cuando Él cura, lo que hace, es liberar al hombre del mal. Quitarle la venda de los ojos que no le deja ver. Hacerle caminar y liberarle de la inmovilidad que no le deja actuar. Expulsar de él aquellos sentimientos malignos que nos inclinan hacia el mal.
Aquél que era curado, como la suegra de Pedro, inmediatamente se ponen a "servir", o a seguirle, o a proclamar sus alabanzas.
Para que Jesús pueda realizar estas cosas, de madrugada se ha retirado a orar. Curiosamente el Evangelio no nos presenta nunca a Jesús rezando en el templo, repitiendo oraciones. Jesús busca la soledad, el silencio, para unirse al Padre.
Los cristianos, si queremos ser sus seguidores, hemos de recuperar estas dos cosas. Una oración profunda, al inicio o al final del día; pero una auténtica meditación que nos dé fuerzas para, luego, poder liberar a nuestros hermanos de los múltiples males que les atenazan. Demasiadas veces hemos separado la acción de la oración. Todos hemos de ser contemplativos si no queremos que lo que hacemos sea mero activismo.
 Pablo en la epístola de hoy grita:
"- ¡Ay de mí si no anuncio la Buena Nueva!".
Nos dice que se hizo todo para todos para ganar a algunos. Pablo no hace sino seguir los pasos de Jesús. Lo que debemos hacer todos sus discípulos. Eso significa "sanar" y "orar": ser un hombre para el Hombre, para ayudar a su liberación y conseguir las fuerzas para hacerlo, en la Unión íntima con Él...
 

viernes, 3 de febrero de 2012

EL ANACORETA Y LAS CELEBRACIONES


El Anacoreta y su joven seguidor habían asistido a una celebración litúrgica. Al salir el anciano dijo:
- ¿Te has fijado en las caras de la gente? Nos hemos de plantear seriamente el asunto de la liturgia. Las ceremonias, en vez de iluminar nuestra Fe, demasiadas veces constituyen un obstáculo. "Administramos" los sacramentos, en vez de "celebrarlos".
Se detuvo un instante antes de proseguir:
- No, no se trata de guitarras o música...Se trata de hacer las ceremonias vivas. De buscar unos símbolos litúrgicos que digan algo al hombre de hoy. Las ceremonias litúrgicas son "celebraciones comunitarias" y eso no se consigue colocando personas unas al lado de las otras, repitiendo unos ritos que no entienden y no viven.
Luego movió la cabeza tristemente:
- Parece que nos quieren hacer volver a formas litúrgicas más antiguas. Lo que debemos hacer es dar vida, celebrar, vivir comunitariamente esas ceremonias...Esa debe ser la finalidad de la liturgia...

jueves, 2 de febrero de 2012

EL ANACORETA Y LAS RESPUESTAS


Viendo el Anacoreta que su joven seguidor estaba muy preocupado por encontrar respuesta a todo, se levantó, tomó un libro de la estantería y leyó:
- Mira lo que dice Rilke en "Cartas a un joven poeta": "Mire de amar las preguntas como si fueran habitaciones cerradas o libros escritos en un idioma extraño. No busque ahora las respuestas; no le pueden ser dadas, no las podría vivir. Y se trata de esto, de vivirlo todo. Ahora viva las preguntas".
Y levantando los ojos del libro concluyó:
- No es que las respuestas no importen, pero hay que encontrarlas en su momento. Mientras tanto, hemos de profundizar en las preguntas. Mantener los interrogantes abiertos nos ayuda a estar despiertos, a buscar, a crear...
Y volvió a depositar el libro en la estantería...