lunes, 13 de febrero de 2017

QUEREMOS PRODIGIOS


"Llegaron los fariseos y comenzaron a discutir con Jesús. Para tenderle una trampa, le pidieron alguna señal milagrosa que probara que él venía de parte de Dios. Jesús suspiró profundamente y dijo:
– ¿Por qué pide esta gente una señal milagrosa? Os aseguro que no se les dará ninguna señal.
Entonces los dejó, y volviendo a entrar en la barca se fue a la otra orilla del lago."

Los fariseos le pedían a Jesús un prodigio para creer en Él. Nosotros también pedimos a Dios que intervenga directamente en este mundo para tener Fe. No acabamos de entender que la Fe no se basa en prodigios, no es cuestión de certezas, sino de confianza.
Nos quejamos ante el dolor y la adversidad de que Dios no actúa. Y no sabemos ver las señales que deja a nuestro alrededor. Esas señales existen, pero no son prodigiosas. Están junto a nosotros, pero debemos saber mirar más allá para verlas e interpretarlas.
Jesús abandona a los fariseos y se va a la otra orilla. Para encontrar a Jesús, siempre debemos ir a la otra orilla, más allá, salir de nosotros mismos. Entonces veremos que los refugiados, los hambrientos, los desnudos, los perseguidos...son las señales para encontrarlo y creer en Él. Que las personas que nos rodean son el Jesús encarnado al que debemos amar.

2 comentarios:

  1. Hola Joan Josep.Para mi poder apoyarme en la Fe en Jesús, ya es un prodigio, cuantas veces me ha dado fuerza para seguir adelante en las dificultades.
    ¡Feliç setmana!

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  2. Si en la otra orilla con los necesitados ayudandoles pero nosotros recibimos mucho mas .el agradecimiento y mucho cariño y sentirte mas cerca de Jesus .
    Gracias por tus reflexiones

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